La depresión es uno de los principales trastornos mentales que sufren los más jóvenes, siendo un importante factor de riesgo para el suicidio. Las principales guías recomiendan para su tratamiento fármacos y/o terapia psicológica. Sin embargo, nuevos abordajes terapéuticos (entre los que se incluye el ejercicio físico) podrían ayudar a mejorar el pronóstico de la enfermedad y reducir además los efectos adversos de algunos tratamientos.